Te desvelamos los secretos del orden en casa.
¿Sabéis que existe una figura que es el organizador profesional?, nosotros habíamos oído de Marie Kondo, pero que existen profesionales y en España, no, no lo sabíamos hasta que nos pusimos hacer este artículo e investigar cuales pueden ser las claves para mantener el orden en casa.
Estos profesionales organizan y planifican el tiempo, realizan rutinas para tenerlo todo en orden, como es el revisado de cajones (la pesadilla) y hacen listas y calendarios que les ayudan en las tareas diarias. Con estas listas vas a controlar todas las cosas que tienes que hacer y aprenderás a organizar cada día tus tareas sin olvidarte. Una simple tabla (de limpieza, menús y compra) nos va a permitir ahorrar y no desperdiciar y en casa establecerá quién hace qué, así que las obligaciones sean para todos. Te dejamos al final una tabla de planificación semanal que te puedes descargar e imprimir.
El orden da armonía y nos hace estar relajados. No es cuestión de una manía por la limpieza, es cuestión de endorfinas. Limpiar y ordenar las libera y nos produce bienestar. Es como un acto de catarsis, de purificación interna y los cambios de estación, son un momento ideal para ponerlo en práctica. Os vamos a desvelar 7 claves para segregar endorfinas y tratar de estar lo mejor posible en vuestra casa.
La primera clave que os vamos a desvelar para mantener el orden es “nombrar un sitio para cada cosa”: El cesto de las llaves, el bote de las monedas, el cajón de los “multiples cables” (otra pesadilla…cada día hay más). Es una técnica que utilizan los japoneses en su vida habitual y funciona. Agrupan objetos similares y crean categorías, descartan lo que no se necesita y dejan espacio para otra cosa importante.
La segunda clave es ventilar bien el dormitorio y hacer la cama. Una habitación recogida transmite orden y tranquilidad. No acumules en la silla ropa aunque no esté sucia. Si ves que te sobra ropa, dona lo que no te vayas a poner. No guardes nada para ese día que nunca llega.
Para empezar con un poco de tiempo por las mañanas y no ir a “mata caballo”, prepara la ropa la noche anterior. Te vas a evitar buscar calcetines y revolver cajones. Además dormirás descansado (¡recordar las endorfinas!).
Clasifica la ropa del color más claro al más oscuro. Ganarás en orden (esto sirve para toda la casa en general). Las perchas idénticas harán que el armario se vea limpio y ordenado. Ojo al tamaño, no es lo mismo una percha para una camisa de adulto que para una camisa de niño. Y poner el gancho hacia el interior así será más fácil coger la ropa.
En cuestión de cajones, ordena en vertical todo aquello que una vez doblado se mantenga de pie. Vas a ganar espacio. Y no metas más de lo que cabe, los sólidos no se pueden comprimir.
¿Cuántas veces hemos oído de eso de que en casa vamos con lo más viejo y desgastado? ¿Cuánta ropa vieja necesitas? Lo desgastado y roto, al cubo gris. Y recuerda, cuando entra algo en casa, algo sale. Si te compras un pantalón es porque uno en casa sobra. Cuando lo compres, ve pensando de cuál te vas a deshacer. La acumulación es la peor enemiga del orden.
Usa cajas y contenedores para las distintas categorías y ordena por lo que más usas.
Cuando llegues a casa no dejes el abrigo en el primer sitio, guárdalo en su armario. Evitarás su reproducción en el salón.
La cama con arcón es ideal para guardar las sábanas y edredones, obviamente, después de pasar por la tintorería o un lavado, y directas a bolsas al vacío. Vas a recuperar espacio. Un truco japonés, es meter los juegos de cama dentro de la funda de la almohada haciendo paquetitos.
Hablemos de la cocina. La tercera clave, es recoger y limpiarla cada noche para empezar el día desayunando en un espacio ordenado y limpio. Puedes elegir un espacio donde tengas todo para el desayuno. Evitarás ir de un lado a otro de la cocina buscando lo que necesitas.
Otras claves adicionales para la cocina es que no se necesitan tantas bolsas de plástico. Son foco de acumulación y desorden además de quitarte algo primordial, el espacio. Esto se puede extender a los botes de cristal, no creo que seas una fábrica conservera.
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Mete los platos y cubiertos en el lavavajillas. Al día siguiente agradeceremos tenerlo recogido.
No necesitamos tener una vajilla de 24 piezas si en casa somos 3. Podemos usar los espacios altos de los muebles para aquellos platos que no usamos a diario. Con respecto a los cubiertos, clasifícalos usando una caja compartimentada sin mezclarlos. Recuerda, el cajón de los cubiertos es para cubiertos, no para meter pilas o tapones… usa un par de botes de los que no has tirado para acumularlos.
La semana pasada hablábamos de los tupper y cómo organizarnos para comer en la oficina (aquí puedes leer el artículo). Tira aquellos que estén viejos y sin tapa. O simplemente los que no uses (estos son los que parece que no, pero el espacio se lo comen).
La nevera ordenada con tuppers para contener los alimentos y preservarlos. Siempre vidrio borosilicato, que no hace migrar partículas a los alimentos. Los tuppers al igual que las perchas, que sean idénticos, darán armonía visual.
Una cosa muy importante y por salud es que cada vez que hagas una compra importante, dar una vuelta a la nevera y tirar aquello caducado, porque sí, todos tenemos algo en la nevera pasado de fecha. Etiqueta los alimentos que saques de sus contenedores originales y pégalo en los tupper. Lo mejor es organizarlos por categorías y dentro de ellas por fechas de caducidad.
¿Te has preguntado cuántas sartenes y ollas necesitas? Imagino que sí y que si son más de las que has pensado, el resto, sobra. Quita las que estén en mal estado y regala las demás. Recuerda la regla de una cosa entra y otra sale.
Por último en la cocina, mantener la encimera despejada porque no, no es un almacén donde poner la publicidad que recogemos, el correo etc. Si está despejada te permitirá limpiarla más fácilmente.
Ahora veamos el baño. Cuarta clave, orden y limpieza. Los baños al ser pequeños y tener pocos muebles no suelen estar tan desordenados. Pero os dejamos unos consejos básicos.
Usa bandejas de metacrilato para organizar los cosméticos. Te van a permitir tenerlos a la vista y ordenados. Nada de tenerlos en un neceser que haga que perdamos tiempo en buscar un lápiz.
Ten solo las toallas que necesites a la vista. Sin acumular encima del perchero radiador.
No acumules jabones, cremas y muestras que se quedarán siglos metidos en los cajones y además pueden caducar. Puedes usar botes dosificadores para champú y gel que dan sensación de orden.
Le toca ahora al salón. Quinta clave, dejar todo ordenado la noche de antes. Los cojines y las mantas sobre el sofá ordenadas y en su sitio y la mesa quitada.
No dejes el correo en cualquier parte. Revísalo y archívalo en la carpeta correspondiente. No amontones facturas y recibos por todas partes. Archivadores y cajas serán tus aliados además de verse bonitas en lugares estratégicos. En ellas además puedes meter las películas, ordenadas por categorías.
El tema de los libros es un capítulo importante que se puede resumir en: separa por temática o estética (tamaños y colores), por los que has leído o no, y si te falta espacio, dónalos y pásate al digital.
Trata de mantener el orden y armonía visual en conjunto, con los cojines en su lugar, las alfombras limpias y rectas y las cortinas corridas o a medio abrir pero en orden.
Arriba os comentaba la cuestión de los cables y por lo que se refiere a los mandos y otros temas de tecnología, utiliza cestos, bridas, clasificadores y canaletas.
Las revistas que vayas comprando asegúrales un sitio en el comedor listas para leer o releer y después recicla, no amontones.
Por último vamos a tratar la entrada de la casa. El recibidor. La sexta clave es tenerlo despejado. Utiliza un buen zapatero para tener los zapatos en orden. Si puede ser un zapatero con cajones mejor para poder descargar los bolsillos. Dentro de los cajones ordena con un separador en metacrilato. Cada cosa en su sitio y a la vista.
Si tienes colgador para los abrigos, aunque ya comentábamos que lo mejor es guardarlo, en ocasiones como cuando llueve no puedes y debes dejar que se oree, por ello limita el colgador a uno por persona de la casa.
La entrada a una casa te puede decir mucho de quién vive en ella. El ser humano usa mucho el olfato. Usa olores que formen parte de tu personalidad o la de tu familia. Utiliza aceites, jabones, incienso o saquitos de olor.
Si tuviéramos que dar la clave principal que resuma todo sería cuidar la rutina dedicando cada día 15 minutos al orden. Si al inicio puede ser inalcanzable, el hacerlo rutinario el orden se mantendrá mucho mejor. Visualiza antes de comprar teniendo en cuenta la regla de una cosa entra y otra sale. Y mantener el orden a raya, nunca salir de una habitación sin ordenar algo. Si no lo haces en ese momento no lo harás en otro y la acumulación tomará el poder.
Es más fácil de lo que en un principio parece. Os dejamos una tabla para que os pongáis directamente a ello y la podáis ir modificando según vuestras necesidades. (Pincha y descarga)